La semana pasada os hablaba de la ansiedad por separación
desde una visión del apego inseguro. Cada vez más, me sorprendo de cómo el
apego es capaz de influir en muchísimos aspectos de nuestra vida. Es por esto,
por lo que hoy os voy a hablar del Trastorno Obsesivo Compulsivo (TOC) desde
esa misma visión.
Todos, de una forma o de otra, conocemos qué es el TOC. Hemos
visto películas, series, hemos oído hablar a otros… Pero, ¿qué es el TOC? Esta vez os pongo una entrevista en la que se
destacan las características principales:
El TOC suele tener un
tratamiento cognitivo-conductual, es decir, un trabajo
que abarca tanto los pensamientos repetitivos como las conductas que la persona hace para rebajar su ansiedad.
Pero, ¿qué pasa si
estudiamos este comportamiento desde las experiencias tempranas? ¿Desde la relación de apego con las
figuras parentales que influyeron en la persona que lo padece?
Si evaluamos el apego como influencia y condicionante en el
TOC, es necesario que hablemos del apego
inseguro evitativo.
El apego inseguro
evitativo es una decisión inconsciente del niño como consecuencia de la no
responsividad de las figuras parentales ante sus necesidades. El niño sabe que haga lo que haga,
pase lo que pase, sus padres no van a estar ahí emocionalmente, no van a cubrir
esa necesidad, no le van a proteger de la amenaza que le aterra.
Esto no ocurre tras una experiencia única. Este estilo de apego se forma tras muchos y muchos intentos en
los que los padres no han respondido tal y como ellos esperaban. Es entonces
cuando piensan “para qué voy a ir” o “total qué más da” y aprenden a inhibir sus emociones y a no expresar sus necesidades
anticipando el inevitable rechazo.
¿Significa que esto ha
sido así durante toda la vida de la persona? No siempre. Algunos padres están encantados con
sus hijos cuando son bebés, les encanta tenerlos en brazos y cuidarlos. Pero
cuando esos niños crecen y pasan a tener 3, 4 o 5 años, el comportamiento hacia
ellos cambia. De la misma forma, puede ocurrir al revés. Padres que no se
comunican con sus bebés, no los tocan, no los acarician… pero, más tarde,
juegan con ellos y les ayudan con las tareas del colegio. Es muy complicado estar inaccesible emocionalmente al 100%. El punto
clave es la continuidad del rechazo de forma que se hace previsible y el
niño, ahora adulto, lo anticipa y se mantiene distante ante la seguridad
subjetiva de que no van a responder como él necesita.
Y ¿qué ocurre cuando
nos distanciamos de las personas que son importantes para nosotros? Que nos sentimos
solos. Solos aunque haya gente, solos aunque tengamos una vida llena de
actividades en común con otras personas. Ante
la soledad, estas personas pueden desarrollar las obsesiones que le llevarán,
más tarde, a realizar las compulsiones. Con su preocupación habitual y sus
fantasías repetitivas llenan ese vacío que les provoca la soledad y su distancia
ante las relaciones significativas.
¿Todas las personas con TOC tienen una pego evitativo? Posiblemente no. Cada persona es diferente y, por
tanto, tiene una historia y una forma de afrontarla diferente. Pero es curioso
cómo problemáticas de esta índole pueden verse influidas por el estilo de apego
creado hace unos cuantos años atrás.
Me alegra saber que sigues al pie del cañón ;)
ResponderEliminarPor cierto, me he animado a comentar porque este post me ha recordado, salvando las distancias, a una rama de la psicología y a una autora que he descubierto recientemente: la psicohistoria, de la mano de Alice Miller (expsicoanalista). Tal vez te interese. De momento llevo leído "El cuerpo nunca miente" (en Scribd hay varios libros suyos), y me he sentido bastante identificado :o)
Un abrazo y a seguir bien!
Hola Hugo! Gracias por animarte a comentar :)
EliminarNo la conocía, leeré sobre ella. En el taller de educación emocional para adultos relaciono la importancia de las emociones y cómo pueden influir a nivel físico, así que va todo muy en la línea de lo que me gusta.
Si quieres leer cosas sobre el apego, busca a Richard Erskine, increíble.
Un abrazo para ti también!
Gracias! En este momento tengo abiertas varias ventanas con artículos de Erskine. Tampoco lo conocía (obviamente, je...), pero eso se va a remediar pronto :P
ResponderEliminarHasta otra, Mónica.